Para gobernar esta novedosa máquina sus creadores han confiado en un sistema operativo basado en Linux, concretamente en Red Hat Enterprise Linux. Una elección que no resulta para nada sorprendente ya que el ranking de las supercomputadoras más potentes del mundo ha estado liderado desde hace años por máquinas que corren este SO de código abierto.
Según el comunicado lanzado por ORNL, Summit proporcionará un poder de cómputo sin precedentes para la investigación en campos como por ejemplo la innovación científica, la energía o la inteligencia artificial, permitiendo descubrimientos científicos que sin ella eran prácticamente imposibles de realizar.
Summit es un sistema IBM AC922 que consta de 4.608 servidores de cómputo, cada uno con dos procesadores IBM Power9 de 22 núcleos y seis aceleradores de unidades de procesamiento de gráficos NVIDIA Tesla V100, interconectados con dos vías de Mellanox EDR 100Gb / s InfiniBand. Cuenta con más de 10 petabytes de memoria combinados con rutas rápidas de gran ancho de banda para un movimiento de datos eficiente.
Para más información consulta el comunicado del Laboratorio Nacional Oak Ridge en este enlace.
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