El funcionamiento de Tomb es sencillo: los usuarios crean una carpeta destinada al almacenamiento cifrado dentro de su sistema de archivos y sólo tienen que ir guardando ahí la información que deseen proteger.
El contenido de la carpeta estará totalmente encriptado y sólo se puede acceder a él empleando unos archivos de claves asociados, que también se protegen con una contraseña definida por el usuario. El sistema permite crear tantas carpetas encriptadas (llamadas “tombs”) como sea necesario, siempre que haya suficiente espacio libre disponible en el disco duro del equipo.
Para facilitar el uso de este software existe un contendor de GUI llamado gtomb, de especial utilidad sobre todo para usuarios poco experimentados en el empleo de este tipo de programas.
Para conocer más detalles así como los pasos para su instalación, consulta el artículo original aquí.
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